martes, 1 de diciembre de 2009

La presentación


Creo que tengo pensado este blog desde octubre. Tiene que haber sido octubre porque en ese mes Fede, uno de mis compañeros de viaje, me dijo que iba a abrir un blog y supe con toda certeza que iba a copiarme su idea. Bueno, tampoco le demos tanto crédito, lo de “SU” idea es también una forma de decirlo. Supongo que a él le habrán dado ganas de copiarse de los argentinos en cebra que anduvieron en 2009 recorriendo Nueva Zelanda.
Para empezar, me llamo Alejandro pero sólo la gente que no me conoce o me odia me llama de esa manera. Para la gran mayoría de las personas soy Alejo. Algunos lo aceptan sin mas, otros, objetan que “Alejo es un nombre distinto” (léase con voz de vieja tarúpida con grandes problemas en sus cuerdas vocales). Para los indecisos, generalmente es Ale, Alej, Aleio, Alejijou, Alejito, Che vos, Bolú(me irrita particularmente), Boló, Fufú y mejor lo dejamos ahí.
Para seguir, me voy a Aotearoa (Nueva Zelanda) por al menos un año. A ser extranjero, joven y viajero por el tiempo que dicte mi conciencia y lo permita la NZ immigration office. Un aspecto no menor de esto es que me voy acompañado, como podrán haber percibido en los párrafos anteriores. Pues, sí, me voy con El gran Fede y el gran Fabio; dos de mis mejores amigos. Los tres esperamos seguir siéndolo luego de la convivencia. Por lo pronto estoy haciendo mucha relajación y repasando mentalmente situaciones posibles.
La idea del viaje comenzó a gestarse el año pasado. Al día de hoy, eso vendría a ser 2008, luego de haber visto por internet la opción de ir a trabajar a NZ por un año y de que absolutamente todo el mundo occidental tuviese un amigo, conocido, primo, hermano de la cuñada del kiosquero de la esquina de la casa de su tía que tuvo la experiencia y fue maravillosa, se llenó de plata, su potencia sexual aumentó, le creció más pelo si era pelado, se le cayó si era peludo, tuvo hijos preciosos y no paró de comer perdices hasta la extinción de la especie misma. Bueno, como no soy tonto y entendí que todas esas cosas, si le pasaron al tío, primo, verdulero, hijo de la hermana del cuñado del tío de un tal Lucas o Agustín, no podía ser de otra manera para mí. Entonces, luego de 5 años de facultad, me recibí, en mi trabajo me mandaron de viaje, mis viejos me ayudaron para que con mi hermana me vaya también de viaje a otros lares; le tomé el gustito a Ezeiza, insistí a dos de mis amigos también recibidos – los antes mencionados Fabio y Fede- que me acompañen hasta que finalmente cedieron.
Un día, ya decididos, empezamos a buscar empresa mediante la cual viajar. Como es necesaria una visa, yo soy partidario de pagarle a alguien que sepa lidiar con la embajada correspondiente para que te salga y no termines pagando vaya uno a saber cuántos dólares por un pasaje y un seguro que luego corrés el riesgo de utilizar como papel higiénico de lujo. Es por eso que llegamos con nuestra querida Silvia quien no sólo nos vendió el pasaje y el seguro, sino también iba a encargarse de lidiar con todas las cosas relacionadas con la embajada, el immigration office, la reina de Inglaterra y vaya uno a saber qué más. La gran sorpresa estuvo cuando nos dijeron “ups, van a tener que aplicar ustedes porque cambiaron las normas para este año”. Nos dieron videos instructivos para saber exactamente qué hacer en el sitio donde deberíamos cargar la aplicación como también pagarla; no sin antes advertirnos que había 1800 postulantes para sólo 1000 lugares y que el sitio de postulaciones andaría mal todo el bendito día de la postulación por la cantidad de usuarios en el servidor.
Imaginen la desesperación de saber que, luego de haber avisado en nuestros respectivos trabajos que íbamos a renunciar, de haber pagado un pasaje con un seguro de 12 meses para un país que quizá nunca hubiésemos visitado de no ser por este programa específico, era posible que nos quedemos sin visa. Afortunadamente, Silvia trabajó mucho con la agencia (se los reconozco) para que todos tengamos la posibilidad de aplicar al mismo tiempo en una oficina con acceso a internet de alta velocidad.
Esa mañana fue la peor mañana en muchísimos años. Yo había dejado de fumar hacía poco más de dos meses y tenía enfrente una página web que funcionaba peor que la línea C del subte. No iba para atrás ni para adelante. Otras personas ya habían podido ingresar su aplicación luego de una hora mientras yo, el pobre infeliz, estaba sudando hacía 4 horas sin poder siquiera avanzar un paso (son 5 pasos los de la aplicación online). Finalmente todo pasó, dejamos de insultar a la familia de Silvia, quien nos había prometido una visa segura y con mucha felicidad recibimos la bienvenida provisoria a lo que será nuestro país en 2010. La foto es la bandera de NZ con un paisaje un toque photoshopeado.

2 comentarios:

  1. falta cada vez menos!!!!!! ave silvia!

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  2. La idea del blog me parece perfecta!! De esta forma cada vez que actualices todos los que estemos acá podremos saber en qué andás.

    Aparte es muy útil tener anotado lo que hacés, yo lo hice durante años y la información está disponible para cuando es necesaria.

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